En la Cueva de La Voz Silenciosa debéis encontraros como en vuestra casa.
Es acogedora, cálida, sencilla y llena de buenas vibraciones.
Convivimos en ella Críspula, mi esposa y yo, Arpelio.
Vivimos realmente en Imparata en el subsuelo del mundo y cuidamos de todas las riquezas que en él existen.
Con nosotros los fantasmas Agamenón e Ifigenia.
Viven en Estragofia. Sí. En la tercera dimensión.
Las brujas Sílside y Nutelia. Ellas habitan en Asterloria, un bonito pueblo. Aunque algo tenebroso. Oscuro.
Y los queridos licántropos Arístides y Nicanor.
Su territorio cuando descansan es Perneseos.
Y aquí en la Cueva de La Voz Silenciosa, junto a José Francisco, cada día, elaboramos el programa que compartimos con vosotros cada noche.
Ya os iré contando cosas.
De momento, aquí queda mi saludo.
